El Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi, desde las Concejalías de Servicios Técnicos y Urbanismo, y a través de la empresa concesionaria del servicio de agua y alcantarillado, Hidraqua, ha puesto en marcha el dispositivo para reforzar la limpieza de imbornales y redes de saneamiento ante la llegada del otoño y en previsión a la caída de las primeras lluvias. Los trabajos consisten fundamentalmente en eliminar hojas, tierra, residuos… cualquier elemento que impida el paso del agua, para garantizar el buen funcionamiento del sistema de drenaje.
Los trabajos han comenzado esta semana, responden a un plan de choque protocolario, que se repite de manera puntual cada año por estas fechas, como han informado el concejal de Urbanismo, Toni Such, y el concejal de Servicios Técnicos, Oscar Pérez, y abarcan todo el término municipal, estableciéndose previamente un orden de intervenciones, a tenor de las prioridades marcadas por los informes técnicos preceptivos, que comprenden la zona de la Playa de l’Albir, Pla de la Serra, San Pere, Avenida Constitución, Avenida Carbonera, Casco Urbano, Calle Ferrería, además de urbanizaciones como Jardín de Alfaz, San Rafael o Belmonte.
El mantenimiento de la red de alcantarillado se realiza de forma continua e ininterrumpida durante todo el año, pero coincidiendo con la llegada del otoño se refuerza la limpieza de imbornales y la red de pluviales l’Alfàs, para facilitar su buen funcionamiento y afrontar, en las mejores condiciones, el cambio estacional, minimizando “en la medida de lo posible” las inundaciones en caso de sufrir lluvias torrenciales y garantizando una mejor evacuación de las aguas de escorrentía, ha señalado Such. Para ello se dispone de equipos técnicos y herramientas especializadas de impulsión succión, necesarios para desarrollar las labores de limpieza.
Y al hilo de la limpieza de colectores, desde las concejalías de Urbanismo y Servicios Técnicos del Ayuntamiento de l’Afàs, se recuerda a los usuarios que el uso inadecuado de los sistemas de alcantarillado de las viviendas puede provocar averías importantes en el sistema general, refiriéndose directamente a quienes tiran las toallitas húmedas a través del inodoro, que provocan atascos peligrosos en el alcantarillado y en las estaciones de bombeo.